La subsecretaria de Prevención y Control de Riesgos del
Ministerio de Salud, Marina Kosacoff, afirmó hoy que "el país se encuentra
en proceso de certificar la eliminación de la transmisión del paludismo".
Una comisión de la OMS certificará ese estatus en el primer semestre de 2014.
La subsecretaria de Prevención y Control de Riesgos, Marina
Kosacoff, señaló que “la Argentina se encuentra en proceso de certificar la
eliminación de la transmisión del paludismo, y está dando un paso muy
importante en términos del continente”, y añadió que “esto obedece a un trabajo sostenido,
centrado en las áreas históricas de transmisión como son las regiones del NEA y
el NOA, donde se han generado condiciones hostiles para la reproducción del
vector”.
La funcionaria, quien anticipó que una comisión de la
Organización Mundial de la Salud (OMS) certificará ese estatus durante el
primer semestre de 2014, realizó las declaraciones al término de una reunión
junto a un equipo técnico de la cartera que sigue la problemática, en vísperas
del Día Mundial del Paludismo, que se celebra mañana.
Kosacoff recordó que “el país ha tenido dos áreas históricas
de transmisión, el NEA y el NOA, en las que se ha reducido paulatinamente hasta
registrar el último caso en 2008” ,
y atribuyó los logros “a la realización de un trabajo sostenido del Ministerio
de Salud en coordinación con las provincias, que abarcó todas las áreas de
riesgo y generó condiciones hostiles para la reproducción del vector”.
En sintonía con el resto de América, donde en los últimos
diez años los casos de paludismo bajaron casi el 60% y las muertes se redujeron
en un 70%, “Argentina se encuentra hoy en una etapa de preeliminación del
paludismo y ya comenzó los trámites para certificar el cese de la transmisión
de la enfermedad en todo el territorio nacional”, dijo Héctor Coto, director de
Enfermedades Transmisibles por Vectores de la cartera sanitaria nacional.
África, en tanto, es el continente más afectado por esta enfermedad,
produciéndose allí el del 90% de las muertes.
En la Argentina, el último caso autóctono se registró en
2008, y desde entonces, los pocos casos que se han reportado son importados,
siendo Salta y Misiones las provincias con mayor riesgo.
El Día Mundial del Paludismo fue instituido por los Estados
Miembros de la Organización Mundial de la Salud en la Asamblea de la Salud de
2007, con el objetivo de poner de relieve la necesidad de trabajar
continuamente en la prevención y el control de la enfermedad y en mantener el
compromiso político de todos los países del mundo en este sentido.
Características de la enfermedad
El paludismo o malaria es causado por cuatro especies de un
parásito llamado Plasmodium, que se trasmite al ser humano por la picadura de
mosquitos Anopheles infectados, los cuales proliferan en cuerpos de agua dulce
de ambientes naturales como charcos o acequias, en especial en zonas rurales
del norte argentino, pudiendo provocar hasta la muerte de la persona afectada.
Sin embargo, es una enfermedad que diagnosticada a tiempo es
curable, por lo que en ámbitos proclives a la existencia de cuadros de malaria,
ante la aparición de cuadros febriles, dolores de cabeza, sudor, escalofríos y
malestar entre los 10 y 15 días posteriores a la picadura, debe hacerse una
consulta médica de inmediato de modo de recibir el tratamiento adecuado.
Especialmente si se trata de embarazadas y niños, cuyos síntomas pueden
agravarse dado que en el período de gestación puede generar anemia y causar
abortos espontáneos o partos prematuros. Los niños nacidos de mujeres que han
contraído paludismo suelen tener menor tamaño y ser más vulnerables a las
infecciones.
Para prevenir la proliferación de la enfermedad se
recomienda eliminar sus criaderos –como en el caso del dengue, el mosquito del
paludismo se reproduce en aguas
estancadas- tapando con tierra o
drenando los lugares donde el agua se acumula, cubriendo los depósitos y tanques
de agua con una tapa y limpiando de arbustos los alrededores de las viviendas.
Además se debe atacar al vector a través del rociado de viviendas y sus
alrededores, a fin de que el mosquito no tenga contacto con el hombre.
La situación de la malaria en Argentina
En el país, hacia mediados de siglo XX, el paludismo se
distribuía en áreas rurales de Salta, Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero, La
Rioja, San Juan, Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones, notificándose 200.000
pacientes anualmente. Hacia fines de los ’40, el uso de insecticidas residuales
disminuyó el número de pacientes a 500 casos al año.
A través de los años, con personal técnico calificado y
distribuido en distintas bases operativas y a través de una metodología
unificada, consistente en el desarrollo de acciones de vigilancia
epidemiológica, búsqueda de pacientes febriles, diagnóstico oportuno,
tratamiento supervisado y rociado de viviendas del paciente y vecinas, se
alcanzó una reducción significativa de la superficie de transmisión vectorial,
que en la actualidad alcanza los 28.000 km2 en los departamentos Orán y San
Martín (Salta); y en menor grado en Jujuy, Misiones y Corrientes.
En relación con la evolución de los casos notificados de
paludismo en el país, si bien en 1990 se evidenció una importante cantidad de
casos (1.530), se advirtió un marcado descenso de ese indicador durante el año
siguiente. Desde 1992 las notificaciones crecieron forma constante hasta 1996,
en el cual se registró la mayor cantidad de casos de los últimos años (2.076).
Posteriormente se ha documentado un marcado descenso en los
casos notificados, dato fundamentado en la evolución durante los últimos años
del principal indicador internacional, el Índice Parasitario Anual (IPA).
El paludismo en el mundo
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud
(OPS) sólo seis países del continente americano alcanzaron la fase de
preeliminación, estos son: Argentina, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, México
y Paraguay, mientras que Colombia, Paraguay y Perú lograron reducciones de más
del 64% en la aparición de casos.
En todo el continente, en tanto, entre el 2000 y el 2011 el
número de casos se redujo en casi un 60%, y en el mismo período las muertes
bajaron 70%. Es decir, la cifra de casos pasó de un millón a menos de 490 mil,
en 2011, al tiempo que las muertes disminuyeron de 439 a 113 durante esos once
años.
En 99 países del mundo hay trasmisión del paludismo siendo
África el continente con el mayor número de afectados y fallecimientos. De los
14 países más acechados por esta enfermedad, Nigeria, República Democrática del
Congo, Tanzania, Uganda, Mozambique y Costa de Marfil reúnen el 47% de los
casos.
Fuente: Sala de Prensa