La antigua aflicción de ilustres talentos como Mozart, Chopin,
y Dostowiesky, entre otros, se concentra hoy en la población más vulnerable. Este
24 de marzo es el día mundial de esa enfermedad.
Bajo el
lema “Terminemos con la tuberculosis durante nuestra generación. Es un
compromiso de todos”, el Día Mundial de la Tuberculosis –que tendrá lugar este 24
de marzo- busca concientizar sobre una enfermedad que, según estimaciones de la
Organización Mundial de la Salud (OMS), produjo en 2011 unos 268.000 casos
nuevos y cerca de 30.000 muertes en las Américas.
En Argentina, la prevalencia promedio de esa enfermedad es
de 23,2 casos cada 100.000 habitantes, según datos de 2010, cuando se
notificaron 9.393 episodios, informó la sede argentina de la Organización
Panamericana de la Salud (OPS). La carga de la tuberculosis se concentra en
poblaciones más vulnerables como aquellas que no tienen acceso a los servicios
de salud y viven en barrios marginales, sostuvo el representante de la OPS/OMS
en Argentina, Pier Paolo Balladelli, durante una jornada en el Ministerio de
Salud de la Nación.
La tuberculosis es causada por Mycobacterium tuberculosis, una
bacteria que casi siempre afecta a los pulmones. Se transmite de persona a
persona a través del aire. Cuando un enfermo de tuberculosis pulmonar tose, estornuda
o escupe, expulsa bacilos al aire. Basta inhalar unos pocos de ellos para
infectarse.
Los síntomas comunes de la tuberculosis pulmonar activa son
tos productiva (a veces con sangre en el esputo), dolores torácicos, debilidad,
pérdida de peso, fiebre y sudores nocturnos. Salvo en casos de cepas
particularmente resistentes, la aplicación de una combinación de cuatro
antibióticos permite tratar y curar el cuadro.
“Nos hemos comprometido en una meta muy ambiciosa que es
llegar a cero muertes por tuberculosis. Sólo podremos lograrla si cada habitante
de este continente y de este país alcanza una vida saludable y acceso de
calidad a los servicios de salud, sin el riesgo de empobrecer por usarlos”, precisó
Balladelli.
La OMS y el Fondo Mundial estiman un déficit de US$ 1.600 millones
en el apoyo internacional anual para la lucha contra la tuberculosis en 118 países
de ingresos bajos y medianos, además de US$ 3.200 millones que podrían aportar
los propios países. Subsanar este déficit permitiría administrar el tratamiento
integral a 17 millones de pacientes y salvar 6 millones de vidas entre 2014 y 2016,
informó la OMS.
Fuente: Agencia CyTA – Instituto Leloir