El paciente sólo deberá informar si tiene obra social para que el ministerio de Salud provincial pueda facturarle la prestación a esa entidad. De este modo, se recupera el costo de la atención en el sector público. Relevaron el perfil de los adictos en distritos bonaerenses.
A partir de hoy, las personas con
obra social que se atiendan en alguno de los 120 Centros Provinciales de
Atención (CPA) y de internación por adicciones, deberán declarar esa condición
para que el ministerio de Salud pueda recuperar el costo de la prestación al
facturársela a la obra social del paciente.
La medida se aplica a partir de
la resolución 663, que lleva la firma del ministro de Salud provincial,
Alejandro Collia, y la facturación a las obras sociales corre por cuenta del
Sistema de Atención Médica Organizada (SAMO) de la cartera sanitaria que el año
pasado en los 77 hospitales provinciales permitió la recuperación de 256
millones de pesos, un 21 por ciento más que el año anterior.
“Demás está decir que todo el
mundo, tenga o no obra social, será asistido sin costo alguno en los CPA porque
es política del gobierno preservar la gratuidad de todos los aspectos de la
salud”, aclaró Collia. Y explicó que la declaración por parte del paciente
acerca de si tiene o no cobertura, permite a la Provincia facturarle la
prestación a la obra social.
Por mes consultan en los CPA y
comunidades terapéuticas de la Subsecretaría de Adicciones unos 12 mil
pacientes. Buena parte de ellos prefiere el sistema público de salud pese a
poder asistirse en clínicas privadas por contar con cobertura de obra social.
“La experiencia del equipo del
sistema público, su conformación interdisciplinaria y el abordaje integral de
la problemática, que incluye el asesoramiento y acompañamiento de las familias,
orienta a muchos afectados hacia los CPA de nuestra red”, detalló Carlos
Sanguinetti, subsecretario de Adicciones.
Y agregó que si bien estos casos
“no son un gasto para la provincia, porque se trata de la salud de sus
habitantes, implican un costo que nosotros tenemos la posibilidad de recuperar
a través de las obras sociales”, explicó
la contadora María del Carmen Esteben, directora del SAMO en el ministerio de
Salud provincial.
Perfil de los pacientes
Un análisis de la Subsecretaría
de Adicciones sobre 6.600 pacientes asistidos en la red provincial de atención
reveló que la edad promedio de inicio del consumo se sitúa entre los 16 y 17
años. Sin embargo, los afectados suelen demorar el comienzo del tratamiento más
de una década, cuando están promediando los 28 años.
La marihuana es la droga de
inicio que se menciona más frecuentemente, con el 44,8 por ciento de los
pacientes encuestados. Sin embargo, no es el cannabis lo que suele llevar a la
consulta por adicciones. En primer lugar se observa a la cocaína como motivo de
consulta, con el 30 por ciento de los casos asistidos, seguida por el alcohol,
con el 25,7 por ciento.
Los especialistas señalaron que,
en rigor, lo que se observa con mayor frecuencia es que los consultantes se
encuentran afectados por lo que se denomina policonsumo, es decir, el uso
abusivo y problemático de varias sustancias psicoactivas.
Fuente: Ministerio de Salud Prov. de Bs As